Reflexiones de verano

Palidecen mis manos de penumbras

Sumergiendo mis ojos al olvido,

- Callada forma de besar tu ausencia -

Tu infinita presencia de sabores y olores.

El ámbar diminuto de tu piel en la mía

De tus tallos erguidos,

De tus hojas dormidas,

De tu savia calante.

!Cielo que cierras tus ojos a la luz!

!Viento que callas mi agonía!

El cedazo del suelo por donde me diluyo,

- Claridad, sombra y vacío -

¿Es acaso un secreto de musas

lo que viene contigo?

¿Es un pobre susurro de gigantes

perennes lo que yo desafío?

La sangre fluye en mis entrañas

entre tus poros y tus pestañas,

sin soñar, sin besar, sin hablar,

sin tan solo circular.

Tu silueta en la tarde,

tu corazón distante

que se va, que se apaga,

que se queda conmigo.

Nashbillee.

Amándola

Ignoraré el vacío de las manos del tiempo,

desangraré la luna muy despacio para no matarla,

Desnudaré mi sombra de otras sombras pasadas,

Y entonces,

limpio al fin de todo,

simplemente la miraré

- y volveré a su lado -

Nashbillee

Reencuentro

Déjame que regrese
de mi viaje fallido,
De mi esperanza rota,
Mi otoño colorido

Déjame que se agolpen
en mis manos los ríos,
los soles, las cañadas
De otros días florecidos

Encontraré la luna
que alumbraba mi noche
y será entonces clara
como en ti la mañana,

Permite que tu tiempo
se detenga en mis labios
silenciosos de auroras
y sedientos de ti

Déjame que retorne
despacito, con sueños,
con canciones de azules,
con palabras, con luz

Espera a que las sombras 

del tiempo diluido
no concurran risueñas
al entierro inasible
de mi respiración

Déjame que regrese,
Que pueda acariciarte,
Resbalando en tu cuerpo
Sin temores, sin dudas

- Sin callar y llorarte -

Déjame que regrese
sólo para Adorarte
y entregarte en mis poros
Lo que soy por amarte.

Nashbillee.

Ausencia

Ausencia en las tardes azules,
en los ocasos tristes y las puestas de sol anaranjadas.


Ausencia en la caída de agua de mi alma,
en el sopor meditabundo de mis sueños.


Ausencia cuando rio y cuando callo,
cuando me entrego por completo
a la locura de mis días,


Ausencia cuando te busco con mi astrolabio
 y solo encuentro tu recuerdo.


Nashbillee

San Pedro de Alcántara

Las paredes encierran las orillas del tiempo

En los balcónes cuelgan disfraces coloridos

Los portales silentes esconden claros sueños

Y las ventanas blancas escapan al vacío

Los cantos de gaviotas se ocultan en el viento

Y los gatos ascienden persiguiendo una pena

Los amantes inmolan besos en los rincones

Y la noche se tiñe pronto con sus pasiones

En el cielo una estrella coquetea con la luna

Y los nuevos luceros son testigos ausentes

Del desfile de insomnios, sentimientos y roces

Que se irán al olvido cuando llegue el rocío

¡Ay cuando ya amanezca!

¡Ay cuando no te vea!

Nashbillee

Resurrecto

Vengo de caminar entre la muerte

por el sendero etéreo de tus muslos,

resbalando hasta tus ojos taciturnos,

y descifrando tu pelo ensortijado.

vengo de lejos, donde tu boca

me ha tocado con su elixir

y tus rodillas se han posado

entre mis manos,

de tan pequeño y grande espacio,

que la luna y el sol son uno solo

de allá, donde tu suave voz toca la mía

y un solo aliento nos da vida

lenta muerte y tan extensa,

 -clara, sola,-

como tu cuerpo largo y bienamado

la recorro despacio y no le temo,

por eso esparzo de nuevo mis pupilas

vengo de caminar la muerte,

por el camino hermoso de tu cuerpo,

desde tu frente amplia de princesa

y tu talle de sueños convocados.

de aquella muerte diminuta

estoy llegando,

sin dejar un instante

tus manos claras 

y tu sonrisa amplia

en mis mejillas.

de aquella muerte

que recuerda tu aroma estoy volviendo,

convocando los duendes y las hadas

para llegar con calma a tu regazo,

a esa limpia mirada 

 -que yo amo-

Nashbillee

Junto al mar

Nueva tonada subyacente,

Iridiscente, anonadada,

Rescatada del tiempo,

del silencio,

-de la muerte-

Canto de entonces,

de ramas mustias y heridas

Alegoría del llanto,

Sonido de dagas y de grimas

Canción de mis envites,

De sonidos lejanos, paulatinos

Arrullo de sirenas, viento nuevo

Ola eterna y distante

que se lleva las huellas

-Que dejé en tu orilla-




Nashbillee

Ensueño

En mis sueños encontré tu etérea figura

rodando lentamente entre amapolas,

con implacable ira en mi regazo

y aureales gemidos en mi boca

en mis largos y hermosos

sueños te inventé:

! clara y fuerte !,

con tu voz desvaneciendo el aire 
y alimentando mis poros 
con tu piel de seda

en mi onírico estado te besé

y elevé mis ojos al profundo

y puro espacio de los tuyos

para no claudicar...

! para no despertar !

Nashbillee.

Compañía

Ciervo, golondrina y aroma de flores

Cándil de mi vida,

-tú alma encendida-

No parto de ti, quedo en esta vida

que nace y renace de tus manos tibias.

En la noche clara

tendrás mi esperanza.

En la madrugada,

seré yo el rocío y aquel sol cantor

Siempre entre tus sueños

y tu entre los míos

Princesa del reino

De este soñador.

Nashbillee

Ocaso

El sol se oculta tras las nubes del tiempo
y en su semblante colorido y radiante
cuenta en silencio la eternidad de tus besos

Tras su silueta  fugitiva y ausente
Brota mi sueño todavía latente

La lluvia cae en la penumbra del día
regando insomne en el susurro del viento,
aquel sendero que me guía a tu nombre


Nashbillee

Modo y forma

200 formas de decir te quiero

En el silencio eterno de mis ojos,

En la serena luna de tu boca

Mientras me invaden tus profundos besos.

200 formas de callar misterios

Como la savia tibia de tu cuerpo

Que alguna vez se perderá en el viento.

200 formas no serán ya nunca

Más que la forma para hallar el modo

De conocerte entera y recorrer tu vientre,

Descubrir tus secretos y tus miedos

O tal vez, sin la forma y sin el modo:

Aprender a decirte que te quiero.

Nashbillee.